SALA 1

Castaña acondicionada como mesa de la sala, perteneció a Severiana García Olivares (1876-1954) y Blas García García (1877-1914), donada por sus nietos Apolinar, Ismael, Rosalinda y Rosbel Peña García, se llevó a Monterrey, N. L. a restaurar. Sala, originalmente fue de Clotilde García García y José Luz Martínez Cantú, después, de Virginia García García (1906-1997) y Felipe Olivares García (1900-1979) avecinados en la ciudad de Monterrey; se traslado a Comales una vez concluida la restauración de la planta baja de la Casa Museo. Mesitas esquineras y Máquina de coser Singer, adquiridas entre los años 30 y 40 del siglo XX por María de la Paz Villarreal de Casiano, fueron compradas a su nieta durante la primera década de este siglo (XXI) por Alicia Olivares García para enriquecer el patrimonio de la Casa Museo. Mesa redonda y sillas de madera, la mesa fue adquirida por María del Socorro Olivares García de Solís en los años 60 del siglo XX en La Lagunilla de la ciudad de México y donada a la Casa Museo en 1998, sobre la mesa sobresale el Diario de Visitas; las sillas “malinche” fueron adquiridas a fines de los años 40 en la ciudad de Monterrey por Felipe Olivares García y Virginia García García permaneciendo desde entonces en esta casa. Ropero reconstruido como vitrina pertenecio al matrimonio Olivares García, Juego de tres velices donados por Policarpo García Morín y reconstruidos por José Arellano Ramírez, Vitrina donada por Alicia Olivares Garcia, y Biombo exhibidor de fotos antiguas y actuales de la presa y Comales donado por María del Socorro y Alicia Olivares García.

Artesania pintada a mano

Traida en 1937 por Felipe Olivares Garcia de Morelia, Michoacan.


Base de lámpara en porcelana, aceitera para máquina de coser y tejedor de hilo en forma de pescadito.

Pertenecieron a Severiana Garcia Olivares los dos primeros objetos y a Virgina Garcia Resendez el ultimo.

Diccionario

Perteneció a Felipe Olivares Sáenz (1827-1910) desde los años cuarenta del siglo XIX, después a Librado Olivares Peña (1862-1937) quien lo donó a su hijo Felipe (1900-1979) quien a su vez lo regala a su hija Alicia Olivares García incorporándolo ésta al patrimonio de la Casa Museo.